Sobre el bosque de Estopa

Después de casi un año el llamado bosque de Estopa, situado en la ribera del río Llobregat, sigue igual. Bueno, ha cambiado algo. Algunos de los arbustos plantados han pasado a mejor vida, otros siguen agonizando dentro de su envoltorio de plástico que no les deja crecer con normalidad, otros no son los arbustos mas adecuados para un bosque de ribera. Me refiero al Salado blanco, una planta que vive en ambientes salinos.

Pero no seamos pesimistas. Las retamas y los Tarays que han sobrevivido, con un poco de suerte llenaran el río de vida: Algunas avecillas los utilizarán para cobijarse, buscar alimento e incluso podrán anidar en ellos; muchos insectos se beneficiarán al igual que las aves; volverán las mariposas, antaño muy abundantes cuando no maltrataban con obras faraónicas el lecho del río; los roedores, al igual que muchos animales, camparan sobre el manto de hojarasca que caerá de los arbustos supervivientes; Gracias a las lluvias de primavera y otoño, se formara una pequeña balsa junto al bosque, para el beneficio de los anfibios, tan escasos en nuestro municipio, y volverá la casi desaparecida Ranita meridional, recientemente localizada por nuestro compañero y amigo Edgar. En definitiva, habremos ayudado un poco a que el río que da nombre a nuestra comarca, sea mas habitado por sus verdaderos habitantes, y a que los vecinos y vecinas de Cornellà puedan disfrutar de este espacio natural que tenemos tan cerquita de casa. Eso si, con respeto como se merece.

Sinceramente pienso que lo expuesto hasta ahora suena más bien a fantasía que realidad. No sabemos el futuro del río Llobregat. Cierto es que cada vez hay mas conciencia, mas movimiento y personas involucradas en preservar nuestros ríos, pero no basta si los que gestionan nuestros espacios naturales lo hacen pésimamente mal, sin dejarse asesorar a veces por expertos en la materia y pensando solo en gastar por gastar.

Animo a todas las personas interesadas en la conservación de la naturaleza a seguir luchando por aquello que creemos es necesario para el futuro de todo el planeta, incluidos nosotros, los seres humanos.

     
 
 

AUTOR: Antonio Salmerón